Lo decía Rubén Darío… “En medio del abismo de la duda, lleno de oscuridad, de sombra vana, hay una estrella que reflejos mana, sublime, sí, más silenciosa, muda”. La Fe mueve a las personas y ciertos lugares, como el Santuario de Lourdes, aglutinan esa energía humana y divina, convirtiéndose en un espacio de peregrinación, de rezo, de paz, de esperanza….